El encuentro contra CA Osasuna se tornó agridulce para Dani Olmo, quien, tras marcar un penalti que puso al Barça en ventaja, sufrió una lesión que lo dejará fuera de acción por aproximadamente tres semanas. El mediapunta, que había comenzado el partido con gran energía, se vio obligado a abandonar el terreno de juego en el minuto 28, dejando a la afición y a su equipo en un estado de preocupación.
Olmo, que había sido una de las figuras destacadas del encuentro, se encontró en una situación desafortunada tras ser derribado por el portero rival, Sergio Herrera, durante su intento de gol. Después de que el árbitro ordenara repetir el penalti, el joven jugador no falló y celebró su segundo gol de la temporada, pero la alegría fue efímera.
El diagnóstico médico confirmó una lesión miofascial en el aductor de su pierna derecha, lo que significa que el Barça deberá afrontar las próximas semanas sin uno de sus jugadores clave. Este contratiempo llega en un momento crítico de la temporada, donde el equipo se encuentra en la lucha por varios títulos.
El técnico Hansi Flick expresó su descontento por la situación, señalando que "las lesiones son parte del juego, pero siempre llegan en el peor momento". Olmo había estado en buena forma y su ausencia se sentirá en el vestuario, especialmente con la proximidad de los partidos decisivos en la Copa del Rey y la Champions League.
El club está a la espera de una evolución positiva que permita a Olmo regresar a tiempo para las semifinales de la Champions, aunque por ahora, su recuperación será el foco principal. Los aficionados esperan que el mediapunta pueda regresar más fuerte y continuar contribuyendo al éxito del equipo.