La ilusión de un enfrentamiento entre Barcelona y Real Madrid en la final de la Champions se desvaneció de manera abrupta. En una jornada que prometía ser histórica, el Arsenal dio la campanada al eliminar al conjunto merengue tras remontar un 2-0 en el partido de ida. La victoria por 3-0 en el Emirates Stadium dejó a los aficionados del Madrid con un sabor amargo y a los del Barça reflexionando sobre lo que pudo haber sido.
El encuentro comenzó con un Arsenal decidido a revertir la situación. La estrella de la noche fue la talentosa Mariona Caldentey, quien no solo lideró el ataque del equipo inglés, sino que también se convirtió en el eje central del juego. Su habilidad para moverse entre líneas y crear oportunidades fue fundamental, especialmente en la primera mitad. Con un fútbol dinámico y agresivo, el Arsenal mostró su verdadero potencial, y Caldentey fue la chispa que encendió el motor del equipo.
El momento clave llegó en el segundo tiempo, cuando Mariona anotó el gol que igualaba la eliminatoria. A partir de ahí, el Arsenal se convirtió en una auténtica máquina de hacer fútbol. Russo selló la victoria con un tercer gol que dejó al Real Madrid completamente descolocado. Las jugadoras del equipo español, como Misa y Athenea, se vieron superadas por la intensidad del juego y el ambiente hostil de Londres.
En la rueda de prensa posterior, Mariona no se guardó nada y dejó claro que el Arsenal sabía que podía dar la vuelta a la eliminatoria gracias a las condiciones óptimas del terreno de juego. En contraste, el césped del Alfredo Di Stéfano había sido un verdadero obstáculo en el partido de ida, lo que generó controversia y críticas hacia la gestión del club español. A pesar de las dificultades, la jugadora mallorquina dejó entrever que el Real Madrid aún tiene mucho que demostrar si quiere jugar en el Bernabéu, especialmente con la presión de tener que ganar un título para poder hacerlo.
En otro ámbito, el FC Barcelona se encuentra en un momento dulce en la Liga, liderando la tabla con una ventaja de tres puntos sobre el Madrid. La confianza del equipo es palpable, y cada jugador parece estar en sintonía. En su último partido, la victoria ante Osasuna fue un claro ejemplo de ello, donde De Jong y Pedri brillaron con luz propia, mostrando un juego fluido y efectivo. Sin embargo, la sombra de la eliminación del Madrid en Champions deja una sensación de incertidumbre sobre el futuro de los equipos españoles en competiciones europeas.