La emoción está en el aire a medida que se acerca la final de la Copa del Rey, programada para el próximo 26 de abril en el emblemático estadio de La Cartuja de Sevilla. Tanto el FC Barcelona como el Real Madrid han llevado a cabo el sorteo de entradas, un evento que ha captado la atención de miles de aficionados.
El Real Madrid ha asignado un total de 19.057 entradas a sus socios, tras recibir 46.922 solicitudes en un sorteo que dejó a muchos sin la posibilidad de asistir al encuentro. Las entradas se han adjudicado a los números de solicitud que van desde el 2.992 hasta el 7.629, lo que demuestra la gran demanda que genera este clásico del fútbol español.
Por su parte, el FC Barcelona no se queda atrás, con 17.701 entradas destinadas a sus socios, mientras que 4.425 irán a peñistas. El número de corte para la asignación de entradas fue el 7.950, lo que también refleja la alta participación de sus seguidores en este evento.
Ambos clubes han destinado un alto porcentaje de entradas a sus respectivas masas sociales, con el Real Madrid ofreciendo el 80% y el Barcelona el 85%. Sin embargo, la competencia por las entradas ha sido feroz, y muchos aficionados se han quedado sin la oportunidad de vivir en directo este emocionante partido.
El sorteo del Madrid se llevó a cabo en Valdebebas, con la presencia de figuras destacadas como José Martínez Pirri, presidente de honor del club, y el notario Cruz Gonzalo López-Müller. Mientras tanto, el Barcelona ha emitido un comunicado advirtiendo sobre la reventa de entradas, un problema que ha crecido en torno a este tipo de eventos. El club ha prometido tomar medidas estrictas para garantizar que las entradas sean utilizadas por sus legítimos propietarios.
Con la final a la vista, la tensión y la emoción aumentan. Los aficionados de ambos equipos esperan ansiosos el pitido inicial, que marcará el comienzo de una nueva batalla en la historia de los clásicos del fútbol español.