En un esfuerzo por proteger a sus aficionados, el FC Barcelona ha lanzado un aviso claro y directo: cualquier entrada que sea detectada como revendida será anulada automáticamente. Esta medida se enmarca en un comunicado oficial que busca salvaguardar la integridad de la afición y asegurar que los verdaderos seguidores del club puedan disfrutar del evento.
El comunicado reza: "Todas aquellas localidades que el club detecte que están siendo ofrecidas y/o adquiridas en un canal de reventa serán automáticamente anuladas y quedarán invalidadas para acceder al Estadio de La Cartuja." Esta política refleja la postura firme del club ante un problema que ha crecido en los últimos años, donde la reventa de entradas se ha convertido en una práctica común, perjudicando a los aficionados leales.
El Barcelona también recuerda que las entradas son nominativas, personales e intransferibles, lo que significa que no se pueden transferir de un dispositivo móvil a otro. Esta medida busca garantizar que solo los verdaderos aficionados puedan acceder al estadio y disfrutar del espectáculo en vivo.
La afición azulgrana ha respondido positivamente a esta iniciativa, apoyando al club en su lucha contra la reventa. Muchos consideran que esta es una forma de proteger el espíritu del fútbol y asegurar que los partidos sean disfrutados por quienes realmente sienten los colores del club.
Con la final de la Champions League a la vista, el FC Barcelona se prepara para un evento que promete ser inolvidable, y con estas medidas, busca que todos los que asistan sean verdaderos culés, listos para animar a su equipo hacia la victoria.