La Champions League ha dejado un sabor amargo en la afición culé tras la reciente eliminación del FC Barcelona a manos del Inter de Milán. Un encuentro que prometía ser un espectáculo se tornó en una pesadilla para los azulgranas, quienes vieron cómo sus sueños de alcanzar la final se desvanecían en el Giuseppe Meazza.
El partido, que finalizó 4-3 a favor de los italianos, estuvo marcado por decisiones arbitrales que han generado un intenso debate. El árbitro Szymon Marciniak ha sido señalado como el principal responsable de la derrota, con muchos aficionados culés clamando por una revisión de las decisiones que, según ellos, perjudicaron al equipo.
La controversia en torno a Araujo
Sin embargo, no solo el árbitro ha sido objeto de críticas. El central uruguayo Ronald Araujo ha visto cómo su nombre se convertía en trending topic en redes sociales, donde muchos aficionados le han responsabilizado de la derrota. Tras el partido, Araujo tomó la drástica decisión de desactivar los comentarios en su cuenta de Instagram para evitar el acoso y las críticas que le llovían.
Entre los comentarios más duros, se podían leer frases como "Siempre apareces en los momentos importantes... Pero para joder todo", lo que refleja la frustración de una parte de la afición que no ha dudado en expresar su descontento. Araujo, que entró en el minuto 76 en sustitución de Íñigo Martínez, no pudo evitar que su equipo encajara dos goles en los últimos minutos, lo que llevó a la prórroga y, finalmente, a la eliminación.
Las voces del vestuario culé
En medio de esta tormenta, las reacciones dentro del club no se han hecho esperar. Gavi, el joven mediocampista, ha aludido a una 'mano negra' que, según él, ha querido evitar que el Barça llegara a la final. "Es muy duro y más sabiendo lo cerca que estábamos. No han querido que lleguemos a esa final porque estaban cagados", afirmó el jugador, mostrando su descontento con la situación.
Por su parte, el presidente Joan Laporta también ha hecho hincapié en las decisiones arbitrales, afirmando que "no pudo ser por decisiones que nos perjudicaron". Laporta se mostró optimista respecto al futuro del club, asegurando que "tenemos un equipo de presente y de futuro" y que, a pesar de la decepción, el Barça seguirá luchando por sus objetivos.
La eliminación ha dejado una herida abierta en el corazón de la afición culé, que espera que su equipo se levante y compita con la misma intensidad en el resto de la temporada. Con la posibilidad de conquistar LaLiga y la Copa del Rey, el Barça tiene la oportunidad de redimirse y demostrar que, a pesar de los tropiezos, sigue siendo un gigante del fútbol europeo.