El FC Barcelona se despidió de su estadio en Montjuïc con una inesperada derrota ante el Villarreal (2-3), en un partido que, aunque intrascendente para los locales, fue crucial para los visitantes, quienes aseguraron su clasificación a la próxima edición de la Champions League.
El encuentro comenzó con un ambiente festivo, donde los jugadores del Villarreal realizaron el tradicional pasillo al campeón, mientras la afición culé celebraba el título número 28 de LaLiga. Sin embargo, la alegría se tornó en sorpresa cuando, a los tres minutos de juego, Ayoze Pérez abrió el marcador para el Villarreal, aprovechando un error defensivo de los azulgranas.
El Barcelona, aún en estado de celebración, se fue acomodando en el partido y comenzó a dominar la posesión. Lamine Yamal, el joven prodigio del equipo, se hizo notar al empatar el encuentro con un espectacular gol desde la frontal del área, un zurdazo que dejó sin opciones al portero rival. Este tanto fue el noveno del joven en la liga, consolidando su estatus como una de las grandes promesas del fútbol español.
Antes del descanso, Fermín López puso al Barça por delante con un potente remate que evidenció la insistencia del equipo por revertir la situación. Con un 2-1 a favor, los culés se marcharon al vestuario con la sensación de que el partido estaba bajo control.
Un segundo tiempo lleno de sorpresas
Sin embargo, el segundo tiempo trajo consigo un giro inesperado. El Villarreal, que había perdido a Ayoze por lesión, no se dio por vencido y, a los cinco minutos de la reanudación, Santiago Comesaña logró el empate con una sutil vaselina que sorprendió a Marc-André ter Stegen.
El Barcelona, que había dominado la primera parte, se vio sorprendido por la reacción del 'Submarino amarillo'. A pesar de los intentos de los culés por recuperar la ventaja, el Villarreal aprovechó un error defensivo en el minuto 80 para que Tajon Buchanan sellara la victoria con un gol que dejó a los locales sin respuesta.
El Barça, que había mostrado un juego brillante durante la temporada, se despidió de Montjuïc con una derrota que, aunque no afecta su posición en la tabla, deja un sabor agridulce en la afición. Aun así, la celebración por el título de liga continuó, y los jugadores, liderados por Hansi Flick, se unieron a la afición en un emotivo homenaje.
La temporada 2024-25 ha sido histórica para el Barcelona, que, a pesar de esta derrota, se mantiene firme en la cima de la clasificación con 85 puntos, cuatro por delante del Real Madrid. La afición culé espera con ansias el regreso al Spotify Camp Nou, donde seguramente continuarán celebrando los éxitos de su equipo.