Kylian Mbappé continúa enfrentándose a obstáculos en su lucha por cobrar los 55 millones de euros que reclama al Paris Saint-Germain (PSG) por salarios y primas no pagadas. A pesar de haber logrado un embargo cautelar sobre esta cantidad el pasado abril, la justicia gala ha decidido descongelar esos fondos, dejando al jugador en una situación complicada.
El juez del Tribunal de Primera Instancia de París ha ordenado el levantamiento de los embargos preventivos sobre tres cuentas del club, lo que representa un duro golpe para el delantero. Los abogados del PSG argumentaron que Mbappé no presentó pruebas suficientes que justificaran su reclamación, lo que llevó a esta decisión judicial.
El conflicto se remonta a la salida de Mbappé del PSG, donde había estado vinculado hasta el verano de 2024. Tras su llegada al Real Madrid, el jugador ha intentado recuperar lo que considera una deuda legítima por parte del club francés. Sin embargo, el tribunal ha fallado a favor del PSG, lo que complica aún más la situación del atacante.
El PSG sostiene que existió un acuerdo verbal en el verano de 2023, donde se estipulaba que Mbappé, al marcharse sin una tarifa de transferencia, perdería parte de las sumas adeudadas. Esta afirmación ha sido desmentida por el entorno del jugador, que califica la situación de “fantasía”.
Las tensiones entre ambas partes han llevado a un estancamiento en las negociaciones, y el caso se encuentra ahora en manos del Tribunal Industrial, donde se espera que se tomen decisiones cruciales en los próximos días. Mientras tanto, el futuro de Mbappé en el ámbito legal sigue siendo incierto, y su situación podría afectar su rendimiento en el campo.
Este nuevo revés no solo pone en entredicho la relación entre el jugador y su antiguo club, sino que también plantea interrogantes sobre la gestión financiera del PSG y su capacidad para cumplir con las obligaciones contractuales. La saga continúa, y los aficionados al fútbol estarán atentos a los próximos capítulos de esta historia.