El Real Madrid ha decidido dar un giro a su dirección técnica y ha anunciado oficialmente que Xabi Alonso será el nuevo entrenador del primer equipo durante las próximas tres temporadas. La presentación del exfutbolista se llevará a cabo mañana, 26 de mayo, a las 12:30 h en la Ciudad Real Madrid, donde el presidente Florentino Pérez le dará la bienvenida en un acto protocolario.
Alonso, quien a sus 43 años se convierte en el relevo de Carlo Ancelotti, llega al banquillo merengue tras una exitosa etapa en el Bayer Leverkusen, donde logró conquistar la Bundesliga, la Copa y la Supercopa de Alemania. Este logro lo convierte en un candidato atractivo para un club que busca recuperar su estatus de élite tras una temporada en la que no logró cumplir con las expectativas.
El comunicado oficial del club destaca que el contrato de Alonso se extiende desde el 1 de junio de 2025 hasta el 30 de junio de 2028, con un año adicional sujeto a objetivos. Esta decisión marca un regreso a la 'vía española', un camino que no ha dado buenos resultados en el pasado con entrenadores como Lopetegui y Benítez.
La elección de Alonso, quien comenzó su carrera como entrenador en la cantera del Madrid, es vista como un intento de revitalizar el proyecto deportivo del club. Sin embargo, la presión será alta, ya que el legado de Ancelotti y las expectativas de los aficionados son enormes. A pesar de su éxito en Alemania, la sombra de los 'Galácticos' y la historia reciente del club podrían jugar en su contra.
Durante su etapa en el Leverkusen, Alonso demostró ser un líder respetado y un estratega eficaz, manteniendo la fe de sus jugadores en sus ideas. Sin embargo, el entorno del Real Madrid es notoriamente diferente, y el desafío de manejar un vestuario repleto de estrellas será una prueba crucial para su carrera como entrenador.
La afición madridista espera que Alonso pueda devolver al equipo a la senda del éxito, pero la historia reciente sugiere que el camino no será fácil. Con la mirada puesta en el futuro, el nuevo entrenador tendrá la responsabilidad de construir un equipo competitivo que pueda luchar por todos los títulos en juego.