La novela sobre el futuro de Ansu Fati parece no tener fin. A pesar de que hace unas semanas se daba por hecho su traspaso al Mónaco, las negociaciones han entrado en un punto muerto que podría alargarse más de lo esperado. La secretaría técnica del FC Barcelona sigue en conversaciones con Jorge Mendes, representante del jugador, pero las diferencias entre ambas partes son notables.
El club monegasco, que se prepara para su participación en la Champions League, está bajo presión. Su entrenador, Adi Hütter, ha dejado claro que necesita soluciones rápidas para poder conformar un equipo competitivo. Con el inicio de los entrenamientos a la vuelta de la esquina, el Mónaco busca cerrar la plantilla lo antes posible.
Las opciones sobre la mesa han variado desde una cesión hasta un traspaso con opción de recompra, pero el elevado salario de Fati ha sido un obstáculo significativo. A pesar de las ventajas fiscales que ofrece Mónaco, el club no puede asumir la totalidad de la ficha del delantero azulgrana, lo que ha complicado aún más la operación.
En medio de esta incertidumbre, la paciencia de Hütter se está agotando. En las últimas horas, se ha conocido que Paul Pogba ha dado su visto bueno a la propuesta del Mónaco, lo que podría indicar que el club está buscando alternativas para reforzar su plantilla. El centrocampista, actualmente en Estados Unidos, ha descartado otras ofertas para regresar a la Liga francesa.
El tiempo corre y el fair play financiero se convierte en un factor crucial en esta ecuación. La afición del Barcelona espera que se resuelva pronto esta situación, que podría marcar un nuevo capítulo en la carrera de Ansu Fati. Mientras tanto, el jugador sigue entrenando y manteniendo la esperanza de que su futuro se aclare en los próximos días.